Pequeños ejercicios
Aprovecha el tiempo que estés sentada para hacer unos simples ejercicios que te vendrán muy bien. Aprieta las nalgas durante unos segundos y repítelo unas ocho veces al día. Haz lo mismo con el abdomen y también estirando las piernas. Tonificarás esas partes que sufren más con el sedentarismo.
Muévete
Pasa mucho tiempo sentada, pero no caigas en la rigidez de tu postura. Trata de moverte y cambiar de postura constantemente. Asómate a ver que hace tu compañero y mueve los pies mientras escribes.
Olvida el mail y el teléfono
Utilizamos en exceso el teléfono y el mail para comunicarnos con personas que están a unos pocos pasos de nuestro puesto de trabajo. Deja el botón enviar y haz tú misma de correo. Al final de la semana podrás quemar hasta 100 calorías.
No al ascensor
Utiliza las escaleras en vez del ascensor. ¿Sabías que subir y bajar escaleras es un gran ejercicio? Pues sí, si utilizas las escaleras al menos tres veces al día quemarás más de 60 calorías.
Camina cuando utilices el móvil
Seguramente hables varias veces al día por el móvil, pues no dejes pasar la oportunidad de hacerlo mientras paseas por la oficina. Al cabo del día habrás andado lo suficiente para quemar bastantes calorías.
No comas en el escritorio
Reserva un descanso para disfrutar del tentempié de media mañana o de la merienda. Está demostrado que si no ponemos toda la atención en lo que estamos comiendo, acabaremos comiendo más de lo debido.
La botella de agua a la vista
Beber agua es muy importante a la hora de guardar la línea. Una forma de beber el agua necesaria es tener una botella siempre a la vista. De esta forma, te entrarán ganas de beber muy a menudo.
Caminar después de comer
Acostúmbrate a dar un paseo tras la comida diaria. Puedes buscar acompañantes y así te resultará más fácil y llevadero hacerlo diariamente. Una caminata así te permite quemar otras 50 calorías diarias.
Ejercita el cuello
El estrés es uno de los enemigos de la báscula, ayuda a coger peso en el trabajo y normalmente lo acumulamos en el cuello. Dedica un momento todos los días a hacer movimientos circulares con el cuello y así liberarás todo el estrés diario.
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