1. CUARTO KILO DE HELADO
Por su practicidad, el helado encabeza esta lista. Posee además, la virtud de ser un gran enemigo del control remoto, pues obliga a tener ambas manos ocupadas (una en el pote y otra en la cuchara), evitando el zapping y promoviendo las clásicas películas románticas, al estilo Franky y Johnny.
2. TE y AFTER EIGHT
La cama depara ciertos momentos que las mujeres disfrutan en soledad. Una taza caliente de Twinings Indian Tai y la frescura de la menta de un chocolate After Eight resultan ser la combinación perfecta para sumergirse en el romántico mundo de las novelas de Florencia Bonelli.
3. NESQUIK Y VAINILLAS
Con el insulto entre los dientes y cabeceando sobre la notebook, lo único que puede hacerte olvidar los deadlines del corneta de tu jefe es seguir laburando desde la cama con un vaso extralarge de Nesquik y media docena de vainillas.
4. TOSTADO Y CHAMPAGNE
Las opciones gastronómicas son limitadas cuando el hambre te sorprende a las 4 de la madrugada en la cama de un telo. Para que no decaiga la acción y se justifique el pernocte, conviene levantar el teléfono, pedir un tostado y una botella de champagne.
5. NAPOLITANA CON PAPAS FRITAS
Si tus amigos casados te abandonaron después del fútbol, siempre te quedara el delivery de La Farola. Transpirado y con las medias tiradas al pie de la cama, clavarte una napo con fritas mirando Fox Sports es un trofeo exclusivo para solteros.
6. MATE y DON SATUR
Para esas tardes interminables de estudio, cuando no sepas como mantener la concentración, el método recomendado es dejarse caer sobre una torre de almohadas con un termo de litro y una adictiva bolsita de bizcochos agridulces Don Satur. El resto, entra por ósmosis.
7. VODKA CON SPEED Y TWISTOS
Como todos los sábados, el predancing se hace en tu depto. Las chicas transforman tu cama en una producción de Vogue en la que nunca falta el Absolut con Speed y varios paquetes de Twistos para amortiguar el golpe.
8. EMPANADAS Y CERVEZA
A la misma hora pero en otro lugar, un grupo de amigotes bebe Heineken desparramado sobre la King Size de un monoambiente. En una reacción desmedida, producida bajo los efectos de la Play Station, uno de los invitados le sacude una empanada de carne picante del Noble Repulgue a su contrincante. La noche recién tomará color cuando se crucen en el boliche a las del vodka con Speed.
9. CHOCOLATES
Por suerte, siempre existe en la mesa de noche la infaltable “cajita feliz” del humano adulto, donde se guardan celosamente medallones de menta Suchard, bocaditos Cabsha, algún alfajor Cachafaz y la dosis necesaria de chocolates para darle sentido a la vida. Advertencia para solteros: es primordial dejar establecido, antes de embarcarse en una relación de pareja, que ese cofre de la felicidad representa el último reducto de privacidad absoluta.
10. SOPA DE CALABAZA
Si la conquista no te volvió a llamar y te tienta ver por octava vez El Diario de Bridget Jones, será momento de recalentar en tu taza de Starbucks un poco del brebaje de calabaza que te envió tu madre para recibir el otoño.
11. SIBARITA
Salvadora como los paquetes de FedEx que Tom Hanks tenía en Náufrago, este manjar de 30 centímetros de diámetro que se va manoteando de a porciones desde la cama se adapta perfectamente al superclásico del domingo como a la entrega de los premios Oscar.
12. SANDWICHITOS SELLADOS
Perfecto para los recién casados. Siendo la sandwichera eléctrica el primer regalo de bodas que retiraste de la lista de Garbarino, estos magníficos triangulitos de jamón y queso, acompañados de litros de Coca Cola, son el menú ideal para tirarse en la cama a ver el video de la fiesta.
13. PICADA EN BANDEJA
Cuando surja la imperiosa necesidad de comer algo salado, nada mejor que manotear esa bandeja que compraste en las rebajas de Fallabella y cargarla con leber wurst, queso camembert, Pringles y Club Social. El problema de la picada es quién se levantará para llevar los aderezos a la heladera, por ello, te sugerimos estoquearte de esos fantásticos sobrecitos de mayonesa, mostaza y ketchup que los creativos de Mc Donald’s han inventado para no salir de la cama.
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